воскресенье, 27 ноября 2011 г.

EL CAPÍTULO 43.


Nicolás no podía dormir. Miró su reloj. El reloj marcaba las tres menos cuarto. Se volvió hacia un lado y luego por el otro, pero un sueño, por desgracia, no fue a él. Cerca de silencio hablar gangoso Mary- Inés, y hasta un poco celoso de ella, que ella estaba durmiendo tan plácidamente y no le molesta. Y su preocupación y no dio sueño otra circunstancia. O nadie. Él era muy confusa, ya que todo es un caos en su cabeza. Nicolás cerró los ojos. Y como si la vida entera pasaba frente a él ...

... Nicolás interesa de inmediato por esta niña con una sonrisa abierta de un ángel, y azul improbable ojos y no veía su rostro sin maquillaje, decidí invitar a un restaurante.
- Entonces, mi padre debe enseñar a su hijo a sonreír - dijo la muchacha.
- ¿Quien enseñaría a esto al papá. ¿Puede ser Usted? ¿Puede, comenzaremos directamente anoche en la cena?
- ¿Qué?
- Podríamos cenar esta noche. Aquí está la dirección. Le esperaré allí ....


... - Y en tercer lugar - cerró los ojos, como tratando de recordar lo que olvidó? - ¿Qué pasa en la tercera? Oh, sí - él la miró, en serio - Yo también tengo miedo de lo que está sucediendo a nosotros, pero no puedo escapar de lo que siento. Te amo, Antonella. Te amo.
La muchacha sólo se desvaneció de su reconocimiento.
- Yo tambien te amo, - una voz apenas audible-susurró con una sonrisa de felicidad en los labios.
Nicolás se inclinó a ella para darle un beso.
- ¿Sabes - se detuvo a mitad de camino - nunca he besado con un payaso.
- ¿Y qué hacemos? - Le preguntó Antonella.
Pero en lugar de responder Nicolás se aferró a los labios ...


... - ¡Cómo me gustaría que esto fuera la verdad, - dijo a la mañana siguiente, Nicolás, estrechando en sus brazos a la muchacha durmiendo - Por mucho que me quería ...
Todos los fines de semana que pasaron en los demás, olvidándose de la realidad ...
- Yo soy tu esposa, - dijo Antonella a Nicolás en la playa - Antes de este aire y estas estrellas. Yo soy tuyo, Nicolás. Y tú eres mi ...


... - Te amo, Antonella y yo quiero a nuestro hijo. No quiero que nuestro amor era como velas en un árbol de Navidad. Velas que, luego se apaga, se enciende de nuevo. No quiero vivir el sueño que por fin estar juntos. Porque soñar, puede perderse el momento en que llama de una vela, finalmente se apaga, y la mano no puede ser un partido para volver a encender la vela ... yo más miedo ... Te amo .
- Yo tambien te amo. Siempre te amado. Toda mi vida he soñado sólo a ti. Toda mi vida fue la suya, y quiero ser tuyo. Deseo que siempre estábamos juntos. Quiero ser cerca de ti... Siempre. Cerca de ti. Te amo.
- Quiero que te conviertas en mi esposa ...
- Quiero que seas el padre de mi hijo ...
Sellaron su oferta reconocimiento beso ...


... Antonella en el vestido de la novia y una corona de flores silvestres en la cabeza ...
Nicolas toda festivo y feliz ...
- Quieres ser feliz? ¿Quieres?
- Sí, quiero ...
- Quieres que le aman?
- Sí, quiero ...
Y la sujeción del juramento pronunciado de la eternidad por el beso sagrado …
- Te amo - dijo Nicolas, mirando a los ojos de su ángel, su vida - un milagro.
- Te amo - en respuesta dijo que redujo Antonella, sin apartar los ojos azul cielo, que refleja su ángel, su vida es un milagro ...


... - ¡Idioto! ¡Cretino! ¡Ansar! ¡Mujeriego! - gritaba Antonella
- Te dije que estaba enmarcada - gritó en respuesta a Nicolás.
- No me digas cuentos de hadas, tonto! Si lo que vi, llamado "partido", entonces yo soy el Papa de Roma. No te atrevas a tocarme! No me toques! ¡Te odio!
- Ni en que no soy culpable ante ti. No te vayas, te ruego.
- No puedo quedarme, Nicolás - Antonella respondió con más calma - Has traicionado nuestro amor. Recuerde la historia de un ángel con un ala? Para despegar, se deberían adoptar con otro ángel. Has roto mis alas, Nicolás. Nunca seré capaz de volar. Adiós.
Y ella se ha ido ...


... - Buenos días, señor Cornejo Mejía! Usted es en un rato.
Nicolás se quedó desconcertado. No sabía qué hacer.
- Hola, Antonella - su confianza y la auto-complacencia desapareció en un instante - No te esperaba aquí ver....


... - Señor, el futuro senador, y ¿de qué raza prefiere -? Bípedos con pechos granes o inferior ...
... - Un pozo salió de aquí - Nicolás se levantó de su silla, agarró el brazo de Antonella y lo arrastraron por las ondas.
- Yo no voy a ninguna parte - comenzó a salir, pero es aún más le apretó la mano.
En el momento en que fueron congelados, mirando a los ojos y ..... excavado en un apasionado beso en los labios, como si tratara de aplacar su sed durante todos estos años ... ..


... De sorpresa cayó la bolsa de las manos y cayó al suelo, y yo yacía a su alrededor para estar en ella las cosas. Antonela se puso en cuclillas y comenzó a recoger el papel.
- Lo siento, - dijo Nicolás y se dejó caer a su lado.
Ayudar a Antonella, que, ya sea por accidente, ya sea especialmente tocó su mano, y en el mismo momento fue seguido por la corriente de descarga, lo que llevó a ambos en completo desorden. Se miraron unos a otros y se sintió un deseo irresistible de tocar uno al otro más fuerte y más audaz, y ya ha tirado sus labios para satisfacer ...
- Gracias por la ayuda, señor Cornejo Mejía - se levantó y abrazó a la bolsa en el pecho, como si temiera que Nicolas se dará cuenta de lo mucho que su corazón latiendo ...

... - ¿Ya has visto mi vida? - Todavía se acercó a ella. En sus labios había una sonrisa insidiosa.
- No sigo - ella se apartó de él, pero no tenía dónde retroceder. Él entró en sus brazos, y un segundo después sus labios se han fusionado en un beso ...


... - ¿Qué se debe su visita? - Le preguntó.
Ella estaba un poco confundido, ¿qué es más lo sorprendió.
- Vine a darle las gracias ...
... - ¿Por qué se callan?
- Martin se metió en un accidente. Todo es mi culpa ...
... - ¿Quieres, hablaré con él? - Pregunta .- Voy a explicar todo lo que le dicen que es incorrecto decir que todo era culpa mía.
Ella lo miró con los ojos llenos de lágrimas, y surgió en ellos la esperanza.
- ¿Estás seguro que hacerlo? - Le preguntó Antonella.
- Es cierto - dijo Nicolás ...
... Ella lo miró .... Cuando sus labios tocaron los labios Nicolás, Antonella dio ese beso con pasión, y de pronto su deseo ...


Nicolás abrió los ojos. Y entonces comprendió. Entendido. Finalmente y de manera irrevocable. Él la ama. Ama tanto que está dispuesto a darle a otro, aunque sólo se sentía feliz. Cada parte de su vida, y cada célula de su cuerpo, su corazón le dio. No permitirá que sufrir.
- Antonella, Te amo, - le susurró en el silencio, se rompió la sonrisa de los labios, y dormir en el mismo momento se cubrió los párpados.

Комментариев нет:

Отправить комментарий